NO LES MIRES A LAS MANOS. Retratos con alma de Alcalatinjazz 2005
-no le pidas que enseñe las manos, no le gusta que le fotografíen las manos-
Cuando estás delante de alguien como Pat Metheny, lo último en lo que puedes pensar es en sus manos. Su mirada los delata, su manera de respirar, su poco interés por todo aquello que no tenga que ver con su obsesión y su genio, aquello por lo que son capaces de encerrarse en una burbuja vital que puede durar doce horas diarias o toda una vida.
La diferencia entre un músico y estos personajes es casi surrealista, ellos no son profesionales, son personas ligadas a una obra, a un fin, a un fuego que les consume y les obliga a dedicarle toda su vida y atención a su modo de expresión elegido. El resto del tiempo…el resto son los intermedios, los anuncios, por los que pasan de la manera más rápida y aturdida posible.
No amigos no, cuando tengan a alguien así delante mírenle a los ojos, por que si no tuvieran manos habrían aprendido a tocar con las orejas.
Luis Barta